La rápida propagación del coronavirus (COVID-19) es un problema grave para la salud pública. Aún se desconoce en qué medida el coronavirus afecta a los pacientes con psoriasis y los tratamientos de esta dermatosis.
Los pacientes con psoriasis diagnosticados con la enfermedad COVID-19, recomendamos que en común acuerdo con sus médicos suspendan o pospongan el uso de medicamentos inmunosupresores.
Esto concuerda con las pautas establecidas para el tratamiento de la psoriasis (por ejemplo según la Academia Americana de Dermatología), que establecen que los tratamientos inmunosupresores para la psoriasis están contraindicados en pacientes con infecciones activas.
Las personas mayores de 60 años y / o pacientes con comorbilidades como enfermedades cardiovasculares, diabetes, hepatitis B, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedades renales crónicas y cáncer tienen un mayor riesgo de desarrollar un curso más grave de la enfermedad. Sin embargo, hasta la fecha, no se ha descripto que los pacientes con psoriasis que reciben tratamientos inmunosupresores sean un grupo de riesgo para desarrollar formas más graves de la enfermedad causada por el coronavirus, por lo que, insistimos en que consulten con su médico las dudas que les puedan surgir.
La relación riesgo-beneficio de cualquier intervención terapéutica inmunosupresora debe evaluarse cuidadosamente en estos pacientes caso por caso.
Se recuerda a los pacientes con psoriasis la importancia de no tomar decisiones unilaterales respecto a su tratamiento sin antes consultarlo con su médico responsable.